Del Aumento del Boleto Urbano de Pasajeros...

El boleto urbano de pasajeros sufrirá un importante incremento. En la próxima sesión del Concejo Deliberante, el valor del llamado “boleto blanco” pasará de $ 3,25 a $ 3,50 en abril, a $ 3,75 en junio y a $ 4 en septiembre.

La inflación, las dificultades para renovar la flota, y los supuestos “atrasos” en el valor son los argumentos que expone la propia empresa. Algunas organizaciones sociales han pedido que se busquen mecanismos alternativos para financiar el incremento. Otras, han sugerido que el municipio asume algún tipo de subsidio para poder compensar la “pérdida”.

En realidad, uno plantea, antes de tomar una decisión, que se responda al menos a tres principios: que las frecuencias, los recorridos y el resto de los elementos que conforman el servicio estén al servicio de la comunidad que, directa o indirectamente, lo sostiene; que el boleto sea accesible a todos los usuarios; y que el concesionario obtenga una ganancia acorde con aquello de lo que estamos hablando: un servicio público.

Por H o por B la Municipalidad no puede ordenar cambios en las frecuencias y los recorridos, el precio del boleto se fija de acuerdo, básicamente, con los datos que brinda la empresa y la ganancia de la empresa se garantiza con la decisión de no renovar la flota con menor frecuencia a la exigida.

¿Qué se puede hacer frente a este panorama? Con información, mucho. Sin ella, nada. Desde hace tiempo, la compañera Samantha David reclama que le muestren el contrato de concesión del servicio firmado por la Municipalidad. Reconozco que yo ni siquiera sabía de su existencia. Hasta el momento, la tarea de Samy ha sido infructuosa. Desde el propio Municipio se desconoce el área donde estaría el acuerdo alcanzado. Sin ver lo que dice, no podemos hacer mucho: por ejemplo, ¿de qué sirve saber si hay que utilizar plenamente los cinco puentes que atraviesan el ejido municipal si no sabemos si la empresa (como alega) no tiene la obligación de cumplir con nuestro mandato? ¿De qué sirve generar fuentes de financiamiento, si no nos queda claro quién está autorizado a vender publicidad para los colectivos o para las paradas?

En fin, el oficialismo impulsa estudios varios y hasta una asamblea pública para fin de año. Pero sin saber cuál es el ordenamiento jurídico al cuál está sometida la empresa, ¿corresponde avanzar?


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