Hace una semana decíamos
que el contrato del municipio con un estudio de Córdoba tenía pésimos
antecedentes (el caso Villegas) y que la queja “corpo-localista” del Colegio de
Abogados (aunque ignoraba el fondo de la cuestión ética planteada) ayudaba a la
instalación del tema. También lamentábamos que hasta ese momento ningún vocero
del oficialismo hubiera puesto el grito en el cielo porque el estudio que se pretendió contratar tenía como
"asociado" en Río Cuarto a un importante funcionario del Ejecutivo.
Finalmente, se dieron cuenta que hasta para hacer las cosas mal hay que
guardar las formas. Hoy el Ejecutivo retiró del Concejo el pedido de
homologación del convenio con el estudio Gentile-Saravia para que los
integrantes del mismo gestionaran el cobro de la sobretasa que sobre los
servicios de telefonía móvil y televisión por cable y satelital paga se brindan
en Río Cuarto.
Finalmente, se cumplió el dicho de mi amigo: "si parece pescado,
tiene sabor a pescado, y lo compraste en la pescadería, y.... lo más probable
es que sea pescado". Era PESCADO nomás. Y muy podrido… Ahora esperemos que
lo envuelvan en un paquetito y lo pongan en la puerta del municipio a
disposición de COTRECO. De lo contrario, también nos quedará claro quién fue el
que ofició de pescador.
Ah… Y gracias a todos los que en esta semana sumaron decenas de pruebas
contra el susodicho. Sé que no puedo nombrarlos, pero, de corazón, gracias. Así
también se defienden los intereses de los habitantes de la ciudad.
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