A las 20 subo a un taxi.
LV3 a todo volumen. El taxista me dice: "Le rompieron el culo al
kirchnerismo". Me hago el boludo. No contesto. El hombre sigue.
"Perdieron por paliza en todos lados. Acá, en Buenos Aires, en La Rioja,
en Mendoza". Le digo: "Disculpe, soy concejal y adhiero al
kirchnerismo. Ah, y creo (tratando de envalentonarme) que esta noche terminamos
festejando" Me dice: ¡Ya sé quien es usted. Yo soy peronista y por eso nunca voté al
kirchnerismo."
Lo dejo hablar. Después de todo, si los dos hacíamos silencio, íbamos a
escuchar a Pablo Rossi en Cadena 3. Preferí la perorata del taxista. Que el
campo, que la crispación, que la falta de diálogo, que el final de ciclo. En
fin, Lanata en vivo... Cuando me bajo, lo saludo con un "Buenas noches,
compañero". El hombre se molesta: "Eeeeeh... yo soy peronista".
Me quedó claro... Mientras siga escuchando LV3, no habrá kirchnerista
que le venga bien... A esta hora de la noche, cuando se acabaron todas las
cadenas nacionales y quedó instalado mediáticamente que el FPV "perdió"
y que "Massa ganó", escucho el final de la historia: tenemos 5
diputados más y conservamos mayoría en el Senado.
Pienso en cómo hará LV3 mañana para explicarle a su audiencia -entre la
que está mi amigo taxista- que el "Martín diputado" no es su
promocionado “Llayllora” sino un tal "Gill" que, encima, en vez de
sacarse una foto con Jesica Cirio salió en varios afiches con una tal Carolina
Scotto, que ni siquiera es pariente de aquel 9 de Platense, Boca y Central.
Pienso, pero como a LV3 no le importa un carajo ni lo que yo pienso ni la
diferencia entre Llayllora y Gill, mejor cierro facebook y me voy a dormir
tranquilito.
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